Crónica de nuestro compañero Juande:

Sábado 08/10/2022, de nuevo quedamos en los Bronces a las 8,30 para tomar algo antes de iniciar la actividad, después de algunas bajas de última hora quedamos Corco, Carlos Galindo, Luisen y Juande. Estacionamos la furgoneta en el aparcamiento de Los Chorros donde empezamos a prepararnos todo el material, una vez todo está listo iniciamos la subida hasta la boca. El plan inicial de hoy es llegar al sifón terminal para dejar plomos de cara a una futura expedición para su buceo, topografiar algunas galerías secundarias y recuperar una manguera para vaciar un charco de agua dentro de una gatera……..
Llegamos a la boca del Sistema de Chorros, como siempre el paisaje no te deja indiferente, nos vestimos con los neoprenos y empezamos a progresar por su interior. Después de superar un resalte llegamos al inicio del Petit Riu, es una grieta alta y a veces muy estrecha, inundada con tramos de bastante profundidad. A través de ella tenemos que progresar unos 200mt con el agua al cuello, empujando el petate y controlando que no se sumerja por el peso, porque sería un problema recuperarlo si cayese en una zona estrecha o profunda. A todo esto, el agua está congelada y a pesar de llevar los trajes de neopreno de vez en cuando tienes que cogerte a la pared y levantar el cuerpo porque los músculos del cuello se congelan y te cuesta moverte. Dejamos el tramo inundado para pasar a una serie de galerías estrechas con algún trepe y destrepe que seguro hacen que desaparezca el frío. Van pasando las horas y llegamos al peor tramo de todos, una sucesión de gateras, laminadores y pasos muy estrechos repletos de barro y agua, que la única manera de superarlos es arrastrándote y formando posturas imposibles con el cuerpo siempre acompañados de nuestra inseparable compañera “la saca”, cabe destacar que entre nosotros nos ayudamos con el paso de las sacas, ¡¡el compañerismo y el trabajo en equipo hacen más llevaderas estas situaciones penosas!!
Poco a poco las galerías se van ensanchando, llegamos a la base de un pozo de unos 18mt el cual al remontarlo nos permite superar el sifón temporal 1, aquí es donde se recupera la manguera para el posterior vaciado del charco de la gatera. Mientras ascendemos el pozo podemos observar pisolitas, son unas formaciones preciosas que se forman con el paso de millones de años, es un privilegio poder observarlas. Realizamos un pasamanos a la salida del pozo y después de superar una serie de resaltes y más metros de galerías llegamos al sifón final. Cuál es la sorpresa al ver que el nivel del agua ha bajado considerablemente, 1mt aproximadamente, lo que nos permite meternos en el agua y explorarlo.
Nos damos cuenta de que hay un paso que desde el nivel del agua hasta el techo quedan unos 10cm, lo que nos permite ver a través del paso y poder tantearlo. Pasados unos minutos de inspección Carlos pasa el primero en apnea, seguidamente Juande, Corco y Luisen. Una vez todos en la otra parte del que era sifón final, que ahora pasa a ser el sifón temporal 2, quedamos impresionados al ver las dimensiones de la galería, una vez termina el lago la galería continua con unas dimensiones tremendas…..Aquí es donde se decide el cambio de planes, los plomos están donde queríamos, pero en lugar de topografiar las galerías secundarias y vaciar el charco de la gatera se decide topografiar la galería que hemos descubierto aprovechando las condiciones del sifón temporal 2, ya que en época de lluvia se inundará e impedirá el paso.
Empezamos la topografía los cuatro, pero llegamos a un caos de bloques con una trepada algo comprometida, Luisen decide quedarse para ayudarnos mientras trepamos y destrepamos ya que un accidente aquí complicaría muchísimo la situación y la seguridad siempre es lo primero. Continuamos Carlos, Corco y yo, curva tras curva de la gran galería, por desfondes, más caos de bloques…..Con la sensación de estar explorando una galería que acabas de descubrir, que
somos los primero en atravesarla en millones de años, que el trabajo de hoy es realmente increíble y que ha valido la pena todo el esfuerzo titánico que hay que hacer para llegar hasta aquí, pero siempre en la cabeza que hay que salir para contarlo. Después de hora y media de topografía llegamos a un sifón final poniendo fin a la exploración de hoy. Regresamos a buen ritmo pensando en Luisen que hoy se ha sacrificado para que nosotros podamos trepar y destrepar los bloques con seguridad. Cuando llegamos a los bloques encontramos a Luisen tiritando de frío y rápidamente pasamos el paso sifonado para comer y calentarnos un poco con unas infusiones antes de iniciar la salida. Mientras comemos decidimos llamar provisionalmente a la galería nueva “La Galería Infinita” y al sifón final “Sifón Mavil”, en honor a un compañero fallecido en este Sistema con una vida entregada a la exploración y muchos de los logros conseguidos gracias a sus informaciones y trabajos.
Arrancamos camino a la salida, de nuevo pasos estrechos, gateras, barro, destrepes…. Dejamos la manguera en el punto de la gatera para su vaciado en un futuro y continuamos hacia la luz. Salimos de la zona del rio y llegamos a la boca, todavía está anocheciendo, ante nosotros tenemos la caída del agua de Chorros y unas vistas mágicas, nos sentimos afortunados de poder estar aquí en este momento, de haber conseguido sumar 270 metros de nueva galería al sistema del Petit Riu, a pesar de las doce horas de exploración, de haber roto los neoprenos, sacas, darnos golpes……..Poco a poco va entrando la oscuridad y ya estamos hablando de los posibles planes para la siguiente exploración del Petit Riu……… Agradecidos de poder formar parte de todo esto y pensando en la próxima!!!
Juande.

Fotos de esta actividad se pueden ver en la GALERÍA DE FOTOS.

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